Plantas resistentes al sol y al calor que llenarán de armonía tu hogar
Las plantas de interior son una opción maravillosa para llenar de armonía y color el interior de tu hogar. Por ello, hemos decidido mostrarte este conjunto de plantas resistentes al sol y al calor, que, además, son fáciles de cuidar, y que podrían ser un perfecto complemento a los beneficios que estas plantas te dan.
PLANTAS RESISTENTES AL SOL Y AL CALOR: LA CINTA
Una de las plantas resistentes al sol y al calor más querida por todos ese la cinta, además, se trata de un ejemplar sencillo de cuidar. Tolera bien los lugares oscuros, sin embargo, te recomendamos ubicarla en un espacio soleado, ya que pueden perder la banda blanca que las caracteriza.
Su situación óptima sería cerca de una ventana. Por supuesto, la cinta tolera bien la sequía y el calor, y no mueren si algún día te olvidas del riego, ya que almacenan agua en sus raíces.
CLIVIA
De entre las plantas resistentes al sol y al calor, la clivia destaca por su gran durabilidad, pudiendo llegar a vivir muchos años. Es una planta de poco riego, es más, si se riega un poco más de la cuenta se pueden pudrir sus raíces.
Se adapta fácilmente a cualquier ubicación, sin embargo, te recomendamos que, para ayudar a su floración, le dejes un período de reposo en invierno. Durante estos meses debes mantener a la clivia en un lugar fresco, sin calefacción y prácticamente sin riego.
A finales del invierno, al salir la vara floral, se da por concluido este reposo.
FICUS DE HOJA GRANDE
Se tratada una de las plantas resistentes al sol y al calor más curiosas, al contar con esas hojas tan características. Te recomendamos un riego moderado, esperando a que el sustrato se seque uno o dos dedos, por lo menos.
En cuanto a la ubicación, se adapta a la perfección a la mayoría de los lugares de tu hogar.
SANSEVIERA
Por último, acabamos con una de las plantas resistentes al sol y al calor más caracterizadas por su fortaleza. Es capaz de aguantar la atmósfera seca, caliente y con poca humedad de algunas habitaciones, una luz pobre, olvido de riego… La fuerza hecha planta.
Lo que te recomendamos es que, para que tenga un color y un crecimiento excepcional, es que la ubiques en un espacio con luz. En cuanto al riego, en general, poco. Durante la primavera y el verano cada 15 días, otoño cada 20 e invierno cada 30 días.