PARJAP 2023 reivindica el papel de los parques en la mejora de “la salud física y mental” y “el bienestar de todo el planeta”
El foro de referencia internacional de la Asociación Española de Parques y Jardines Públicos (AEPJP) pone el punto final a tres días de ponencias en el centro de innovación La Nave, en Madrid.
Las conclusiones destacan la necesidad de crear más parques y conectarlos entre sí, así como de asegurar la accesibilidad de todos los grupos ciudadanos y fomentar su participación en la gestión de la infraestructura verde.
La última jornada del congreso se ha centrado en la presentación de iniciativas exitosas en todo el mundo, con el Anillo Verde de Madrid y ejemplos de Iberoamérica, Singapur, Túnez y Eslovenia.
El Congreso PARJAP Madrid 2023 ha cerrado su 49º edición con la presentación de las conclusiones de tres días de ponencias en torno al lema ‘Los parques y jardines, sistemas naturales de salud’. Las intervenciones de los más de 20 expertos que han participado destacan que los espacios verdes en las ciudades “disminuyen el estrés, mejoran la atención y el ánimo, y facilitan la actividad física, con juegos, paseos y la práctica deportiva”. Además, contribuyen a mitigar el cambio climático y a garantizar “la salud y el bienestar del planeta”.
El documento de conclusiones, presentado en la clausura del Congreso PARJAP, muestra que “en el siglo XXI, las investigaciones científicas están respaldando la afirmación de Hipócrates de que la naturaleza cura”. Además, incide tanto en los obstáculos que aún es preciso superar para impulsar los beneficios de los parques como en los distintos ejemplos de éxito expuestos.
El Congreso PARJAP resalta, a través de las conclusiones, que “los barrios más densos de nuestras ciudades cuentan con pocos parques y jardines a a distancias recomendadas (menos de 300 metros) para facilitar su uso por la ciudadanía y tampoco están conectados entre sí, “lo que no facilita los paseos prolongados”. También destaca distintas propuestas para cambiar estas situaciones, desde el proyecto Walking People en Madrid, a las Rutas Naturbanas de Costa Rica.
Por otra parte, el documento de conclusiones del Congreso PARJAP subraya la necesidad de “contar con la participación ciudadana de forma que se fomente el sentido de pertenencia bidireccional”. También aboga por “permitir la accesibilidad de todos los grupos ciudadanos”, con proyectos específicos para ellos: jardines educativos para niños, espacios deportivos para adolescentes, jardines terapéuticos y con elementos tecnológicos para personas con discapacidad o patologías, de forma que sean “realmente espacios para todos”.
Otra idea destacada que ha dejado el Congreso PARJAP es que “la salud que nos proporcionan estos espacios no es exclusiva de los humanos. Mediante la biodiversidad y su importante contribución a la mitigación del cambio climático, garantizamos la salud y el bienestar de toda la vida en el planeta”.
El 49º Congreso PARJAP, organizado por la Asociación Española de Parques y Jardines Públicos con la colaboración institucional del Ayuntamiento de Madrid, ha reunido en el centro de innovación La Nave a más de 500 congresistas para debatir sobre las cuestiones más actuales en la planificación y gestión de las zonas verdes. La próxima cita será en Pamplona, en 2024.
Buenos ejemplos de todo el mundo
PARJAP ha dedicado su última jornada del congreso a presentar experiencias exitosas en la gestión de los parques urbanos desarrolladas en distintos países del mundo y que muestran los objetivos resumidos en las conclusiones.
Tres ejemplos de Iberoamérica han compuesto la primera ponencia del día. Martín Andrade, responsable del primer programa nacional de parques urbanos en Chile, ha expuesto cómo su equipo rediseña las ciudades intentando salvar el déficit de espacios verdes a través la máxima: “Medir, Dialogar, Acordar y Hacer”. Federico Cartin ha presentado el proyecto Rutas Naturbanas en Costa Rica, un ejemplo de recuperación ciudadana que transforma espacios naturales descuidados en los márgenes fluviales dándoles una nueva vida a través del ecoturismo. Desde México, Itziar de Luisa, ha explicado la transformación de un vertedero en el parque más importante de la capital mediante la participación ciudadana.
La segunda sesión ha tenido como protagonistas tres casos en Asia, Europa y África. Angelia Sia ha descrito la visión de Singapur de ser “una ciudad en la naturaleza” con una estrategia integrada, que suma la protección de reservas naturales, la conexión de las zonas verdes y la integración de la naturaleza en las zonas edificadas. Desde Eslovenia, Mája Simoneti ha tratado los desafíos de planificar espacios verdes públicos y ha defendido el “aprovechar el conocimiento del pasado y experimentar lo que funciona para aplicarlo en el futuro”. Finalmente, Sondes Fkiri ha compartido los resultados del parque de Sidi Amor en la ciudad de Túnez, que consiste en la reconversión “de un bosque degradado en un parque multifuncional e inclusivo, con beneficios que incluyen desde frenar los impactos del cambio climático hasta la puesta en marcha de nuevos negocios de cultivos agroforestales”.
Dos anillos verdes para Madrid
La última ponencia del Congreso PARJAP ha presentado el Doble Anillo Verde de Madrid, una infraestructura verde de 75 kilómetros, formada por dos anillos concéntricos: uno más urbano y otro periurbanos conectados entre sí, que rodearán la capital como una corona y funcionarán como pulmón de la ciudad y conexión de los puntos naturales que ya existen en la ciudad. Nuria Bautista, de la Dirección General de Gestión del Agua y Zonas Verdes del Ayuntamiento de Madrid, ha expuesto las claves de este ambicioso proyecto de naturalización de la ciudad.
La ponente ha resaltado que desde el comienzo del proyecto, en 2020, se ha creado un marco estratégico y espacial para el reverdecimiento de la ciudad con la finalidad del fomento de la biodiversidad, tanto de la fauna como de la flora, mediante la implantación de soluciones basadas en la naturaleza. Los objetivos son mejorar la salud física y psicosocial de los habitantes y la ecología de la ciudad.
El proyecto se completa con las islas de biodiversidad y pequeños parques dispersos por la ciudad. Para medir cómo funciona todo lo que se va implementando, se ha adoptado el índice Singapur, un referente internacional que establece cuatro tipos de indicadores para conocer la evolución de la biodiversidad en torno a las características de Madrid.
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