Orígenes y beneficios de la jardinería vertical
La jardinería vertical se constituye como una corriente de gran novedad en la jardinería. Se presenta como una alternativa a los sistemas de ajardinamiento y construcción tradicionales. Básicamente, podríamos indicar que la jardinería vertical trata del diseño y construcción de superficies ajardinadas en un plano vertical.
No es algo tampoco una idea excesivamente moderna, ya que el desarrollo de vegetación sobre las edificaciones es una práctica habitual desde hace muchos siglos en distintos lugares del planeta, como podemos encontrar en los conocidos tejados verdes, o las plantas que crecen sobre las fachadas de los edificios.
LAS CONTRIBUCIONES AMBIENTALES Y ESTÉTICAS DE LOS JARDINES VERTICALES
La jardinería vertical tiene importantes beneficios, tanto ambientales, como estéticos a las personas que viven y/o trabajan en los edificios donde se encuentran este tipo de jardines. Destacamos:
- La refrigeración en verano y aislamiento térmico en invierno
- La reducción del consumo energético
- Filtración del polvo y otras partículas contaminantes
- Reducción y amortización de ruido exterior
- Protección de los materiales constructivos
Durante el verano, la sombra proyectada por las hojas de la vegetación reduce el impacto de la radiación solar, también, muchas plantas trepadoras levantan sus hojas en respuesta a la dirección del sol, creando un efecto de ventilación, ya que el aire fresco penetra hacia dentro y el aire caliente es dirigido hacia arriba, de forma que la evaporación y la transpiración generan un efecto de refrigeración.
CONTRIBUCIONES AL ENTORNO URBANO DE LA JARDINERÍA VERTICAL
La jardinería vertical, no sólo tiene beneficios ambientales de forma concreta en los edificios en los que es utilizada, también significan una importante contribución al entorno urbano, y lo es, gracias a:
- El aumento de la biomasa de la ciudad
- Mejora visual estética
- Atracción de la fauna
Sin duda, la contribución que mejor podemos percibir de la jardinería vertical es la mejora visual, sobre todo de paredes medianeras y fachadas posteriores de edificios antiguos. Además, la vegetación en fachada provee reposo y alimentos a pájaros, animales invertebrados e incluso pequeños mamíferos, que conforman la naturaleza urbana de nuestras ciudades.
