La telegestión de los sistemas de riego, un sistema que permite el ahorro de agua en los parques

Ayuntamientos de grandes ciudades han puesto en marcha en los últimos meses medidas para realizar un riego eficiente.

En determinados lugares, el 80% de la cantidad de agua consumida a nivel municipal está destinada a la conservación de espacios verdes.

El ahorro de agua en los parques es uno de los principales objetivos que las entidades locales han establecido en sus planes de actuación en torno a la infraestructura verde. Ayuntamientos de capitales del España han puesto en marcha en los últimos meses medidas para realizar un riego eficiente.

La utilización del riego telegestionado facilita un mayor control del agua. Además, al realizarse durante la noche se incrementa la efectividad y se reduce la evaporación que ocurre en las horas de mayor luz solar. Estas iniciativas conllevan en determinados lugares inversiones que permiten ahorrar, al menos, un 20% del agua que los servicios municipales emplean en el mantenimiento de los parques y jardines.

Los nuevos sistemas permites también el ajuste de la programación de riego establecida en función de la información meteorológica obtenida de internet en tiempo real. Además, se pueden activar o desactivar los riegos públicos con un solo ‘click’, una función importante si se tiene en cuenta que determinadas ciudades suponen el 80% de la cantidad de agua consumida a nivel municipal.

Un dispositivo para ‘hablar’ con el jardín

Algunos ayuntamientos también están realizando pruebas piloto con determinadas herramientas de tecnología disruptiva. Destaca la utilización de una sonda, en forma de esfera, que se encuentra enterrada en el suelo de los parques y jardines públicos con capacidad para medir parámetros relacionados con la humedad del suelo, la tensión hídrica, la textura, la salinidad y la temperatura. Los valores que obtiene los transmite a la aplicación que controla los equipos de riego para el conocimiento de los usuarios.

Los técnicos municipales podrán, de esta manera, interactuar y ‘hablar’ con el jardín y determinar el uso más eficaz del agua. La herramienta facilitará aplicar dosis de riego ajustadas a las necesidades de los jardines de cada ciudad según el momento. Para ello, se utiliza un software de gestión que permite procesar la gran cantidad de información que llega desde los sensores, con el objetivo de que las decisiones estén orientadas al bienestar de la ciudadanía y la eficiencia en la utilización de recursos hídricos por parte de la administración sin renunciar a los beneficios de los servicios ecosistémicos.

Como aspecto novedoso, la aplicación permite generar gemelos digitales para simular y comprobar el comportamiento de las sondas según una organización jerárquica idéntica a la de la propia ciudad, sus barrios y calles. Una vez se compruebe su buen funcionamiento, el sistema puede extenderse, en una primera fase, a los jardines más significativos y, más tarde, al conjunto de las zonas verdes.