Félix Carballera: “impulsar la formación implica una mejor gestión de los parques urbanos”

Continuamos con la serie de entrevistas, que con motivo de la proximidad del Congreso PARJAP 2022, queremos fomentar debates sobre la actualidad en el sector del verde urbano a partir de los puntos de vista de la experiencia de los miembros de la Junta Directiva.

En esta ocasión, contamos con Félix Carballera, jefe del Departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alcobendas y Secretario General de la AEPJP.

Félix Carballera es uno de los nombres referencia en materia de parques y jardines a nivel nacional. Licenciado en ingeniería forestal por la Universidad Politécnica de Madrid, ha trabajado durante una década como director técnico de empresa en el ámbito de Jardinería y paisajismo. Además de funcionario de carrera en el ayuntamiento de Alcobendas desde el año 1999, accede a su actual cargo de Jefe de Departamento en el año 2007.

Dentro de la Asociación, Félix gestiona la coordinación organizativa, la dirección administrativo-jurídica y la dirección de la prestigiosa revista PARJAP.

¿En tu opinión, qué función cumplen actualmente los espacios verdes de las ciudades?

El concepto de espacios verdes en la ciudad ha evolucionado hacia la Infraestructura Verde Urbana. Cada vez son más conocidos por los ciudadanos y a la sazón principales usuarios de esa infraestructura verde, la gran cantidad de beneficios ecosistémicos que nos aporta: sumidero de CO2, disminución de la isla de calor, mejora de la estructura del suelo, fomento de la biodiversidad, etc. Es decir, despojándonos del academicismo, para mí los parques y jardines de las ciudades en particular, y la Infraestructura Verde en general, son sinónimo de naturaleza, biodiversidad, salud, belleza, ocio, encuentro, relax, juego, conversación, amor, en definitiva, calidad de vida para las ciudades y sus habitantes.

¿Qué aspectos crees son fundamentales para optimizar y mejorar la gestión de la infraestructura verde urbana?

Lo tengo muy claro: mejor formación para los profesionales del mantenimiento con titulaciones de grado específicas y canales de calidad para la formación de nuestros jardineros (profesionales de la jardinería), y si además somos capaces de imbuirles la vocación por la profesión, sería el desiderátum.

¿Crees que con la situación actual ha cambiado la percepción de la ciudadanía sobre los espacios verdes urbanos?

Si por situación actual entendemos la derivada de la pandemia, es un hecho palpable la mayor valoración de los ciudadanos por tener cerca de su ámbito social buenos parques, bien mantenidos y dotados de equipamiento. Valga como argumento de confirmación el pasado y sufrido confinamiento cuando se permitía a la población empezar a salir de sus casas. Uno de los destinos preferidos eran las zonas verdes como espacios de desahogo.

¿Y qué función han cumplido en estos dos últimos años?

Precisamente lo que he comentado. Han ganado en importancia para la sociedad como espacios de socialización y, si se me permite, como islas de salud en el escenario de pandemia que desgraciadamente nos está tocando vivir.

¿Qué papel está jugando la formación en el sector? ¿Cómo crees que va a evolucionar?

De alguna forma ya lo he comentado. Creo que a nivel de actuales y futuros gestores de IVU, hay mucho y buen interés para la formación complementaria. La asistencia en las Jornadas Técnicas y Congresos organizados por AEPJP y otras asociaciones del sector así lo acredita. Si además de eso hubiera un mayor espectro de la formación específica de grado, sería ideal.

Otro cantar es la formación profesional de los jardineros. Obviamente toda generalidad acarrea injusticia, pero a mi parecer la vocación por la profesión va desapareciendo, salvo honrosas excepciones, conforme se va produciendo el relevo generacional en la profesión. La jardinería necesita técnica, pero también precisa de humanidad, amor por la naturaleza, en definitiva, de vocación. Si le quitamos ese matiz estaremos haciendo una jardinería industrial. Y eso no es lo mismo. Y, por cierto, desterremos categóricamente aquello de que para ser jardinero sirve cualquiera…

Resume en una palabra el año 2021

V-A-C-U-N-A

¿Cuál crees que va a ser el mayor reto al que se va a enfrentar la infraestructura verde urbana en el próximo año?

Del próximo año y los siguientes la IVU, en la persona de sus gestores, debe estar preparada tanto a nivel de diseño como de gestión pura para absorber la creciente demanda de uso de la ciudadanía, y que los beneficios ecosistémicos que citaba al principio pasen de lo conceptual a lo cuantitativo y los usuarios tomen conciencia de ello y lo aprovechen individual y colectivamente, al tiempo que ayuden haciendo un uso adecuado que palíe la degradación paulatina de algunos espacios.

¿Y el mayor reto al que se enfrenta la AEPJP como asociación?

Principalmente ir haciendo nuestra propia desescalada de la pandemia retomado poco a poco la presencialidad en todos los eventos que organiza la AEPJP, culminando a coro plazo con el Congreso de Zaragoza PARJAP 2022 donde tenemos muchas ganas de encontrarnos todos otra vez y con el horizonte del 50 Aniversario de la Asociación que culminará con el PARJAP 2023 en Madrid.

¿Qué te gustaría aportar o conseguir con tu participación en AEPJP durante el próximo año?

Seguir colaborando con el excelente equipo de compañeros y amigos que me acompañan en la Junta Directiva, trabajando juntos en pos de los objetivos que nos hemos marcado a corto y medio plazo. Luego vendrá el necesario relevo generacional, ya muy cercano.

Por último, ¿algún proyecto que quieran destacar del último año?

El buen resultado de las actividades digitales organizadas bajo este formato obligados por la pandemia y con el máximo interés para que la AEPJP siguiera aportando formación al sector.

Junto a lo anterior me gustaría destacar lo que para mí ha sido la confirmación de un reto totalmente novedoso. Se ha conseguido organizar el primer y espero que único, PARJAP en formato totalmente digital con éxito de crítica y público.

Todo ello no habría sido posible sin todos y cada uno de los compañeros y compañeras que han trabajado denodadamente en algo que resultaba desconocido y con un nivel de incertidumbre muy importante, pero que suponía un reto sugerente. A todos ellos mi agradecimiento y máxima consideración.