La influencia de los Factores Bióticos y Abióticos en la gestión del arbolado
En la gestión del arbolado, se pueden encontrar fácilmente dos tipos de factores generales que condicionan la administración de los grandes vegetales de nuestros espacios verdes. Hablamos de los Factores Abióticos y los Factores Bióticos.
FACTORES ABIÓTICOS
Los Factores Abióticos son condicionantes producidos por la misma presión humana. En una ciudad, el arbolado se encuentra expuesto a dificultades que pueden ser controlables o no por parte de los gestores.
Algunas de las dificultades no controlables, serían los actos vandálicos e incívicos, golpes por el tráfico rodado, daños producidos por obras…
En el otro lado, tenemos las dificultades controlables, como pueden ser los fallos a la hora de elegir las especies, marcos de plantación inadecuados, malas praxis en la gestión… Condiciones que pueden ser revertidas mediante el análisis y posterior acción.
FACTORES BIÓTICOS
Cuando hablamos de Factores Bióticos, nos referimos principalmente a problemas del tipo entomológico, como, por ejemplo, las termitas de madera seca, el picudo rojo… Plagas que antes de acabar con la vida del árbol, le producen fuertes perforaciones y galerías que llegan a debilitar enormemente la estructura del vegetal.
Hay que tener también en mente, todos los problemas relacionados con la fitopatología. Las complicaciones de las fracturas en ramas o vuelcos de árboles, que pueden estar estrechamente relacionados con la acción de hongos xilófagos.
Para prevenir y detectar fallos internos, es muy recomendable el uso de pruebas minuciosas. Tales como tomografías y resistografías de tronco y ramas, ya que las inspecciones visuales no siempre son pruebas fehacientes de lo que puede estar ocasionando daño al árbol.
RELACIÓN ENTRE FACTORES ABIÓTICOS Y BIÓTICOS
La confección de una planificación de los riesgos para el arbolado, que sea eficaz y que estandarice prácticas preventivas, es clave para la gestión eficiente de los grandes vegetales en nuestros espacios verdes urbanos.
¿Por qué? Porque las causas de problemas entomológicos o fitopatológicos de los Factores Bióticos, pueden estar, en ocasiones, relacionados con los Factores Abióticos. Ya que las incidencias que las plagas pueden ocasionar, como la fractura de las ramas, pueden haber sido inducidas por mala praxis en una gestión anterior. Por ejemplo, con la realización de podas drásticas.
Una planificación consciente de los riesgos, y selectiva en sus acciones, pueden implicar en un cuidado más focalizado y útil. Tanto para la salud de los árboles, como para el conjunto de los espacios verdes.