Tipos de actuaciones en la gestión del arbolado
Como mencionamos en nuestro artículo de la semana pasada, una buena gestión del arbolado es esencial para la salud de la naturaleza urbana y de la comunidad que disfruta de los espacios verdes.
A lo largo de nuestro artículo de hoy, nos enfocaremos en las actuaciones que se materializan a lo largo de un programa de mantenimiento del arbolado en una ciudad.
Las actuaciones son el conjunto de actividades técnicas y documentales, cuya finalidad es la de gestionar y conservar el arbolado para que este cumpla las funciones establecidas, tales como la estética, medioambiental, sanitaria, etcétera.
Lo más importante de estas actuaciones es que sean garantes de la seguridad del espacio verde urbano, que evitar o minimicen fallos en el arbolado que puedan derivar a fractura de ramas o caídas de los mismos.
De esta manera se establecen dos tipos de actuaciones de mantenimiento en el arbolado: Actuaciones correctivas y Actuaciones preventivas.
ACTUACIONES CORRECTIVAS
Hablamos de actuaciones correctivas cuando nos referimos a aquellas acciones de carácter urgente, como la sintomatología ante un fallo inminente. Actuar para conseguir minimizar los daños o evitar la incidencia. El motivo de esta actuación es, la mayoría de las veces, imprevisible.
Puede ocurrir que las actuaciones preventivas, a las que nos referiremos próximamente, no hayan podido solucionar una circunstancia, y se derive un problema posterior.
También puede ocurrir que no se detecte el aspecto anómalo que priorice dicha actuación, no pudiendo evitar el fallo, es por ello, por lo que las actuaciones preventivas son la clave para evitar los riesgos.
ACTUACIONES PREVENTIVAS
Las actuaciones preventivas son aquellas acciones realizadas en base a una planificación en períodos establecidos, estas acciones, administran la situación de los árboles, procurando mantenerlos en las condiciones adecuadas para reducir los posibles fallos.
Son acciones usuales, tales como los trabajos de poda, formación o saneamiento. La idea que subyace a estas actuaciones es la de la anticipación frente a un posible fallo.
Esto se consigue a través del conocimiento de los ejemplares, mediante información documental y el trazado de análisis de los posibles parámetros de cuidados y actuación.
Frente a las actuaciones correctivas, las preventivas suponen un proceso más complejo. Esto no exime de la sinergia de estas acciones, ya que las diferentes acciones afectan directamente a la correlación de las mismas.