5 flores de febrero para llenar de color tu jardín
Febrero es un mes complicado para las flores, debido a que la climatología en España es muy variable en función de la zona en la que estemos. En algunos puntos de la península, comienzan a llegar temperaturas más cálidas y estables, mientras que, en otros lugares, los fríos intensos de inverno se perpetúan.
Sin embargo, las inclemencias del tiempo no bastan para que la naturaleza se abra paso y aparezcan flores en balcones y jardines. Quédate con nosotros en este artículo para descubrir cinco flores de febrero.
HORTENSIA DE INVIERNO
También conocidas como Bergenias, son unas plantas que suelen desarrollarse en zonas montañosas. Se trata de uno ejemplar de formas vivaces, con tallos rastreros y hojas ovaladas de color verde con un tinte rojizo en los bordes.
Son plantas muy resistentes, capaz de soportar temperaturas muy cambiantes, sin embargo, te recomendamos situarlas en espacios de semisombra y aportarles un riego frecuente en el verano.
EL ALMENDRO
Este árbol es un icono de finales de febrero, cuando empiezan a llegar los primeros trazos de la primavera, comienzan a emerger sus preciosas y características flores, anunciando el inicio de la primavera.
Si tienes el suficiente espacio como para plantar este árbol, te recomendamos ubicarlo en un lugar soleado donde no haya muchas heladas en invierno, ya que durante su etapa joven es muy sensible a las temperaturas bajas.
NOMEOLIVDES
Estas pequeñas plantas de colores muy vistosos son capaces de animar con sus pétalos cualquier espacio de tu jardín o hogar. Además, sus cuidados son fáciles, por lo que no tendrás que preocuparte en exceso para disfrutar de ellas.
Te recomendamos ubicar la nomeolvides en el exterior, a pleno solo o semisombra, siempre teniendo en cuenta que reciba entre 3-4 horas de luz directa sin problemas.
En cuanto al riego, durante el verano es importante regar de manera frecuente, evitando que se seque, mientras que, en otoño e invierno, con 2 veces por semana es suficiente.
ARABIS CAUCÁSICA
Se trata de un ejemplar muy resistente, de tipo herbácea. Su gran capacidad de resistencia, con la que se puede desarrollar en ambientes muy adversos, se une con sus características flores para ser una planta muy recomendable a nivel estético.
A pesar de poder soportar etapas de sequía y temperaturas de hasta los 15 grados bajo cero, a la arabis le encanta el sol, por lo que te recomendamos cultivarla en un espacio con un drenaje adecuado y expuesta a una gran cantidad de luz solar.
LA DIMORPHOTHECA
Se trata de una planta herbácea de hoja perenne, muy recomendable para rocallas, borduras y lugares del jardín en el que necesitemos cubrir el suelo.
Es una flor capaz de aguantar temperaturas frías, pero no heladas, por lo que intenta resguardarla durante el invierno. Para ayudarla a tener un buen desarrollo, te recomendamos ubicarla en un lugar soleado, sin embargo, también se adapta bien a la semisombra.
